Estos biotopos en medio de los paisajes agrícolas o zonas de gran superficie aumentan de forma significativa la diversidad biológica. Muchas especies como las mariposas, escarabajos, reptiles y pájaros como el alcaudón dorsirrojo, o mamíferos como los murciélagos necesitan  plantas leñosas como sitio de cría protegido y como base para la caza. Las frutas de los arbustos son un recurso de alimentos básicos. Las gramíneas y hierbas que crecen al lado de las plantas leñosas son el hogar de numerosos insectos que a su vez son alimento de otros animales. De esta forma, incluso pequeños biotopos de plantas leñosas contienen un gran número de especies.